Broquel 9 Juana Manuela Gorriti

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DIEZ AÑOS SADE ZONA NORTE PALABRAS DE LA PRESIDENTE
DIEZ AÑOS
JUANA MANUELA GORRITI
*QUIEN ESCUCHA SU MAL OYE*

(Fragmento -CONFIDENCIA DE UNA CONFIDENCIA - 1865)

-Cuando hemos caído en una falta – me dijo un día cierto amigo - si la reparación es imposible, réstanos al menos, el medio de expiarla por una expiación explícita y franca. ¿Quiere usted ser mi confesor, amiga mía?                      
-¡Oh! Sí – apresuré a responder.

-¿Confesor con todas sus condiciones?
-Sí. Aceptando una.
-¿Cuál?
-El secreto.

¡Oh!, ¡mujeres!, ¡no podéis callar ni aun a precio de vuestra vida!; ¡mujeres que profesáis, por la charla idólatra, culto!: ¡mujeres que… mujeres a quienes es preciso aceptar como sois!
-Acúsome, pues – comenzó él, resignado ya mi indiscreta restricción -, acúsome de una falta grave, enorme, y me arrepiento hasta donde puede arrepentirse un curioso por haber satisfecho esta devorante pasión.

Una obra maestra de la antigüedad,  relato fantástico.

SADE ZONA NORTE


PALABRAS A LOS LECTORES

Guardado entre papeles y libros, yace el primer ejemplar del Broquel, desvalido, incoloro, indefenso, fotocopiado, con la austeridad y el temor que provoca algo nuevo, pero al leerlo refleja la intención de los primeros hacedores, trasunta identidad, nobleza y dignidad. Con el paso del tiempo los continuadores trataron con esfuerzo y voluntad de esmerarse, optimizando cada artículo hasta llegar a un nivel de excelencia. Vecinos amables sirvieron de sponsors, una gráfica lo tomó con afecto y lo convirtió en un ejemplar, que hoy luce su esplendor por San Isidro. El Broquel es nuestro orgullo, como también son estos diez años de perseverar defendiendo la palabra escrita. Actuamos conjuntamente en el desarrollo de actividades diversas. Nacimiento de libros, certámenes literarios, tertulias, juegos florales, encuentros con nobles propósitos que nos permitieron conquistar espacios.
Brindamos un libro anual y de esta forma bautizamos al primero “VIVENCIAS”, seguido de “REFLEJOS”, “POIESIS”, “POIESIS II”  y este año “POIESIS III”.
Estamos aunando esfuerzos en concretar y despedir este año 2010, una celebración con cierre de lujo, donde la música el arte y literatura  se harán presente.
Es un honor entregar la primera antología generada por SADE ZONA NORTE,  premio a los galardonados del certamen “SAN ISIDRO 2009”, ocho autores que recibirán sus libros con las obras premiadas.
Puedo decir que siento un ligero cosquilleo dentro de mi alma cuando escribo estas palabras. Para todos aquellos que creyeron, que nos siguen acompañando y que son bienaventurados por apostar a la constancia que revindica trabajar con amor y sentimiento por la cultura.

                                                                                           

Camina desdichado poeta
te domina el blanco del folio
buscas en vano la inspiración perdida
y regresas, una, mil veces
a tu frase preferida

                                                                            Estela Garrido
                                                                            Escritora

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LA MUJER ARTÍFICE DE LA PATRIA (II)

Las mujeres en la evolución de la cultura
Juana Manuela Gorriti Zuviría, salteña (1818-1896, fechas discutidas), hija del general José Ignacio Gorriti y de Feliciana Zuviría. Por la militancia unitaria de sus padres, debieron emigrar a Bolivia. Sobrina del célebre político y canónigo Juan Ignacio Gorriti. Talentosa e innovadora escritora, también  famosa por las peripecias de su vida y por su notoria afición a la cocina.  Su matrimonio con Manuel Isidoro Belzú, fue desgraciado, pues éste en su afán de permanecer en el centro de la vida de Bolivia no dudó en conspirar y fomentar rebeliones en su país. Se lo ubicó como uno de los más representativos “caudillos bárbaros” que gobernaron esa tierra. En Lima, Juana, creó una escuela de educación primaria, donde tuvo origen su famoso salón literario que congregó a las personalidades más sobresalientes. Sus cuentos y novelas fueron publicados y difundidos en Chile, Colombia, Venezuela y Argentina. Luego de la caída de Rosas también en Madrid y París. Hasta la muerte de Belzú fueron muchos los sufrimientos de Juana Manuela, quien luego de despedir los restos de su esposo logró trazar una línea sobre su pasado. Se establece en Buenos Aires; recopila e
imprime su producción y escribe relatos autobiográficos. Por su vida llena de situaciones difíciles dónde tuvo que valerse por sí misma en un mundo hostil e insensible a sus aspiraciones, construyó el camino que le permitió ser una literata valiosa y en su madurez una política. Progresista. Precursora y creadora de la novela argentina fantástica, épica, leyendas y descripciones americanas. Su notoria afición por la cocina, dio origen a su libro de arte culinario “La cocina ecléctica” que además del valor gastronómico, tiene un gran valor documental ya que aporta muchas recetas folclóricas argentinas, de otros países latinoamericanos e incluso cocina europea de su época. Las empanadas son llamadas en Bolivia “salteñas” debido a que fue ella la que difundió su preparación y consumo en ese país. Innovadora del discurso femenino y el imaginario nacional, en su producción es posible descubrir la forma en que se creó un espacio femenino dentro de las comunidades de cada país, el lugar de la literatura en las sociedades poscoloniales y la intimidad de las guerras por la independencia, en las que la mujer ocupó un lugar fundamental. Su vida transcurrió entre Lima y Bs. As. anciana y enferma regresó a Salta.
Juana Manso (1819-1875) Escritora, traductora, periodista, maestra y precursora del feminismo en Argentina, Uruguay y Brasil, poeta y gran oradora, autora de novelas históricas, denunció las opresiones de la época. Participó en las luchas de la Revolución de Mayo de 1810. Intervino en el gobierno de Bernardino Rivadavia, fundó escuelas y el Ateneo de las Señoritas. Su amigo José Mármol la instó a escribir en diarios regionales. Identificada con el romanticismo de Esteban Echeverría publicó poemas bajo diferentes seudónimos. Se casó con un violinista apenas discreto Francisco de Saá Noronha. En Brasil publicó historias y tratados filosóficos y obtuvo varios éxitos con obras teatrales La familia Morel, A Saloia, A Esmeralda y Rosas. Fundó su primer semanario Jornal das senhoras. Regresó a Buenos Aires y publicó Los misterios del Plata, referido a las persecuciones de Rosas, libro de gran éxito. Editó Álbum de señoritas y La familia del comendador. José Mármol la presentó a Sarmiento, coincidieron en promover las escuelas públicas y mixtas. Cuando fundó la Escuela Normal Mixta N°1 Manso fue nombrada Directora. Postuló el aprendizaje basado en la observación y la reflexión, el respeto a las necesidades y grados de
 maduración del niño, base de la enseñanza pública, adquirida por las escuelas del mundo. Sarmiento
 la consideraba como la única en América del Sur que había interpretado su plan de educación. Fue la principal contribuyente a los “Anales de la Educación”, creada por Faustino Sarmiento para difundir nuevos planes de enseñanza. Escribió el primer manual de historia con lenguaje sencillo,



para los primeros años de enseñanza. Con Sarmiento como presidente fundó 34 escuelas con bibliotecas públicas, introdujo el inglés, las planillas de asistencia, la realización de concursos para los puestos directivos, promovió un proyecto de profesionalización docente en la Legislatura de Bs. As. Fue la primera mujer vocal del Departamento de Escuelas en 1869 y también la primera incorporada a la Comisión Nacional de Escuelas, durante la presidencia de Nicolás Avellaneda. En el semanario Flor del aire, rescató la vida de mujeres que lucharon por la independencia y la libertad como Manuela Pedraza y Juana Azurduy. Murió a los 55 años; sus restos descansan en el Panteón del Magisterio en el Cementerio de la Chacarita. La poetisa Juana Manuela Gorriti despidió sus restos diciendo: “Gloria de la educación, sin ella nosotras seríamos sumisas, analfabetas, postergadas,  desairadas. Ella es el ejemplo, la virtud y el honor que ensalza la valentía de la mujer, ella es, sin duda, una mujer.”
Rosa Guerra es la primera autora teatral argentina de la que se tiene noticia cierta. Fue maestra desde los 13 años, fundó una revista de educación, escribió con el seudónimo de Cecilia en La Tribuna, La Nación Argentina y El Nacional. En 1860 publicó la novela Lucía Miranda. En 1863 editó su libro de lectura para niños y en 1864, año en que muere, Desahogos del corazón, un volumen de poemas. También la leyenda de Lucía Miranda inspiró a otra escritora argentina del siglo XIX. Sobrina de Juan Manuel de Rosas, hija de su hermana Agustina Ortiz de Rosas la más hermosa de su época y del general Lucio Norberto Mansilla, hermana de Lucio V. Mansilla (Una excursión a los indios ranqueles) y prima de Manuelita Rosas, nos referimos por supuesto a Eduarda Damasia Mansilla Ortiz de Rosas, (1834-1892). Precursora en su género, traducida a otros idiomas, logra un nombre destacado por su labor literaria. Perteneció a una verdadera elite, tanto en lo social como en lo político y cultural. Se casó con Manuel Rafael García con quien tuvo seis hijos. Acompañando a su marido, recorrió las grandes ciudades de Europa y Estados Unidos. Consagrada en el mundo de las letras llegó al Viejo Continente por segunda vez y durante ocho años su salón brilló con la presencia de grandes escritores: Víctor Hugo, Jules Massenet, Laboulaye... Escribió la novela El médico de San Luis, artículos sobre educación musical, reseñas de actividades musicales de Bs. As., composiciones para canto y piano. Reclamó la creación de los Conservatorios de música y actuación y una ley protectora del teatro nacional. Estuvo radicada en Francia y a su regreso estrenó su obra La marquesa de Altamira. Otras de sus obras fueron: Pablo ou la vie dans les pampas, Cuentos, Recuerdos de viajes, Creaciones, Marta, Cuentos fantásticos. Eduarda formó parte de un mundo de elevado nivel intelectual y artístico. Tanto Rosa Guerra como Eduardo Mansilla se inspiraron en la leyenda de Lucía Miranda creada por el imaginario nacional, donde se acunan el romanticismo y feminidad.

Todas las mujeres a las que nos hemos referido fueron los cimientos de un país donde todo estaba por hacerse. Dibujaron caminos mágicos, encendieron brasas de luchas, fueron arquitectas de sueños por donde hoy camina la mujer ama de casa, estudiante, profesional, defendiendo día a día su lugar en la sociedad de esta patria que desde diferentes lugares logran construir.

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                         EXTRAVIOS

   De pronto estamos ahí con Laura, en ese bar con mesas a la calle, y me vienen ganas de orinar. El baño está clausurado. Le digo Laura que me espere y busco en otro boliche. Cuando vuelvo, el bar no tiene más mesas en la vereda y de adentro se escapa una música frenética. Entro y veo una cantidad de tipos bailando. Un bar gay.  Un rubio de barba con pinta de marinero sueco me agarra fuerte el brazo y me dice con acento bien nórdico: “Ven acá, no te vayas”. Me voy. Salgo corriendo sin rumbo. De Laura nada. Camino por unas calles de tierra irreconocibles. Cruzo por barrancones y, de repente, ahí nomás, el mar. Pienso en Laura, dónde encontrarla. Pienso eso y me despierto. A mi lado, Laura duerme de cara a la pared. Un mal sueño. La doy vuelta para contarle y me encuentro con la cara del marinero sueco, que sonríe.
                                                          
CARNEVALE

Jorge Carnevale, estudió periodismo en el Instituto Grafotécnico y fue Premio Konex 2006. Publicó el libro de cuentos “Detrás” (Cero, 1975) y las novelas “Impostergable”
(Tiempo Contemporáneo 1971) y “Puesta en limpio” (Ediciones de la Pluma, 1984), y el ensayo “ Así se mira el cine hoy” (Bea, 1995). Además participó de las antologías “Doce cuentistas” y “Cuentos de cine”, compiladas por Sergio Renán.  


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LUIS MARÍA SOBRÓN

Mi sangre arde
en tus manos,
besa los juncos
de la orilla ausente.
Muere,
en el eco
de un poema.                         LUIS MARÍA SOBRÓN

Jaro Godoy: ¿Maestro, como definiría usted el término poesía?
Luis M. Sobrón: Para mí la poesía es el canto del ruiseñor atrapado por el cuervo en la garganta de la noche; la poesía es un canto diferente a todas las expresiones estéticas, del arte de escribir, de toda la literatura. Siempre pienso que la herencia de los griegos nos dio a nosotros el motivo de la ensoñación poética. Comenzaron los amigos poetas de Grecia con la poesía y en ese canto poético, tradujeron todas las realidades de sus vidas, amatorias, de trabajo, de las guerras, de todos los órdenes sociales, de lo que era la vida y la comunicación en sí. Es por eso que a la poesía yo la amo y le tengo un profundo respeto; la poesía vendría a ser como un cisne, en un lago inefable a las adversidades, porque la poesía es la verdad de lo bello.

Poeta y ensayista argentino. Su vasta obra lo distingue entre las más reconocidas letras argentinas. La dimensión poética de su escritura resalta el impecable manejo del lenguaje,
el manejo de metáforas e imágenes de singular belleza y un itinerario lírico de marcado tono metafísico. Integró varias antologías nacionales y extranjeras.
Premios-Distinciones: *Faja de Honor de la SADE, por Poemas e la vida y la palabra (1990).
*Socio Honorario de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE).
*Miembro de Honor de la Fundación Argentina Para la Poesía.
*“Premio Alfonsina” a la Creación Poética (1997).
Obra Publicada: Yo caminero. 1975 - Poemas de la vida y la palabra.1990, Faja de Honor de la SADE. - Salmo de cenizas.1993. – Máscaras sin rostro. 1996.- La ciénaga de cristal. 1998. – El alma en el espejo. 2000. – Celebraciones (Antología) 2001.- El otro. (Summa Poética) 2003.
Nació en Nogoyá, Pcia. de Entre Ríos. Falleció en Mar del Plata el 24 de junio de 2010.

Mis ojos,
Oráculos de otra orilla.
no distinguen más
las tatuadas sombras de los juncos.

Buceo el lecho de arena y greda
            hasta llegar al acero visceral
del unicornio en su trágico destino.

Paralizan mis brazos
            cegados estertores
sin coros de aleluyas.

No tendrá más orillas
            el cauce de mi rio.

Órficos albatros
de memoriosos mares
            esculpirán, en ojivales cielos
los raros alfabetos de mi rostro.                                     
Nacio en Nogoyá, Pcia De Entre Rios      
Falleció en Mar del Plata el 24 de Junio 2010
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NACE UNA LUZ ENTRE LAS SOMBRAS


Nace en Morón una niñita como tantas otras, desarrollándose en un ambiente de calidez hogareña y buenas costumbres. Su alegre infancia transcurre con los juegos comunes de antaño y crece entre predios de terrenos frutales, potreros, animales de granja y quintas de verduras. Pero un buen día la fatalidad cegó la luz de sus ojos, contaba tan sólo con seis años. En medio de esa oscuridad creció su frondosa fantasía con la magia de sus días luminosos, transportándola con ilusión a su futuro. Lejos de caer en la melancolía pide a sus hermanos leer libros en Braille y así en forma autodidacta comienza su práctica de lectura y escritura. En ese contexto nace el fenómeno social literario, los rasgos dominantes de su literatura son sencillos, forja frases con gran inocencia. En su rebeldía ingobernable y enfocando su meta hacia el horizonte siguió formándose a pesar que otros males la aquejaron, como una severa deformación de columna y una incipiente sordera. ¿Quién fue esta rebelde luchadora llamada La ciega de Morón? Su nombre es VICENTA CASTRO CAMBÓN, que se incorpora como educadora en la Biblioteca Argentina de Ciegos en el año 1924. Sus primeras obras las firma con el seudónimo de “La ciega de Morón”. Publicó en 1923 “Rumores de mi noche” como docente escribía sus propios textos y en el año 1927, “Cajita de música”. Publicó en variados diarios y revistas. “Padre nuestro que estas en la Cruz”, “A María en su soledad”, “A que Señor me atrevo”, “Cantando lo haré”, “Era la Nochebuena”, etc.
CHIPITO del libro Rumores de mi Noche.
Voy a contarles un cuento que a mi hermano / oí cuando pequeña / leer un librito que él había / traído de la escuelas / escucha complaciente, Viejo mío, / porque quiero que tú sepas  l  lo que en mi triste vida me ha servido / como lección eterna. / -II- Una alegre docena de pollitos / salió por vez primera / del paterno corral, con rumbo a un campo / que estaba de allí cerca / gozosos recordaban los pequeños / que en el corral oyeran / decir que el campo era muy hermoso /  y en él mil cosas nuevas / pensaba encontrar y así charlando, con alegría inmensa / seguían a su madre que es sabido, / marchaba la primera / a poco que anduvieron, los pequeños / notaron con sorpresa / que en el camino había un albañal, / en cuya orilla opuesta / estaba ya su madre, quien decíales, / que cosa fácil era / saltar de la zanjita al otro lado /porque era muy pequeña. / Pero ellos, ni siquiera se movieron / temblando cual si fuera / el albañal un río caudaloso / y en vano su elocuencia / gasto la buena madre, ni uno solo, / trató de complacerla, / y solo murmuraban: - ¡no podemos! / si no tenemos fuerza… / ¡Pero intentad siquiera obedecerme! / De nuevo insistió ella / ¡Haced lo que yo hago! ¡Abrid las alas! / ¡A ver, haced la prueba! / Chipito , el más pequeño, dando a todos / ejemplo de obediencia. / Yo quiero obedecerte, madre, dijo / más… no me ayudan a alcanzar la otra orilla…/ Desalentada ella / reunióse a los pequeños y emprendieron / hacia el corral la vuelta / de pan un pedacito, la gallina / halló junto a la puerta / y, claro está, los chicos esperaban / su parte en la merienda. / Esto es para Chipito,-  gritó entonces la madre muy severa, /  y al ver que los pequeños la miraban / con gesto de protesta, / les dijo:- Si Chipito no ha podido / salvar la zanja aquella, / Abrió, por darme el gusto sus alitas  /  yo premio su  obediencia.

CONMEMORACIONES A VICENTA CASTRO CAMBÓN:
Una calle  en la ciudad de GLew, Almirante Brown en Argentina lleva su nombre.
El Hogar para Ciegos, fundada  por María Catalina Marchi lleva su nombre.
La Escuela Vicenta Castro Cambón (para personas con diferentes capacidades visuales)  lleva      su  nombre.
La Biblioteca Popular, en Francisco Álvarez, Buenos Aires, lleva su nombre.
 El premio de poesía Vicenta Castro Cambón.
            Nació el 28 de septiembre de 1882. Murió el 17 de mayo de 1928.
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Más sobre Juana Manuela

La vida de Juana Manuela fue tan novelesca que amenaza con convertirla en personaje de cualquier escritor y atrapar a los lectores en su obra literaria. Su vida abarcó casi todo el siglo XIX cuando las guerras de la independencia y todos sus protagonistas vivos o muertos eran todavía una referencia palpable. Sus veladas literarias en un país donde algunas mujeres sólo escribían algún poema patriótico o sentimental escandalizaban; gustaba de hacer bromas y algún que otro flirt  alimentaba la comidilla cotidiana de la ciudad. Soñaba todo el tiempo con irse a otro lugar y en ese momento, su otro lugar era el mundo de la imaginación, donde siempre habitó. La Argentina aparece en las puntas extremas de su vida, origen y muerte. Marta Mercader escritora, en su libro editado en 1980 (Sudamericana) atinó con su título a describir su fuerte personalidad: *JUANA MANUELA, MUCHA MUJER.*



lL VIVAC  Juana Manuela Gorriti     (Fragmento - Conjunto de carpas)
Las sombras han sucedido al día, y a su bélico tumulto la plácida calma de la noche. En el fondo de la quebrada, a la orilla izquierda del río de León, una línea de fogatas eleva sus rojas llamas bajo el ramaje florido de los duraznos. Es el campamento de los guerrilleros patriotas. Allí centenares de hombres de razas, costumbres y creencias diversas, unidos por el sentimiento nacional, guerrean juntos partiendo la misma vida de azares y de peligros. Y en aquel momento, sentados en torno de la misma lumbre, reunidas en pabellones sus heterogéneas armas y mezclando sus dialectos, se abandonan a las turbulentas pláticas del vivac. Allí se encuentra el acicalado bonaerense, el rudo morador de la pampa, el cordobés de tez cobriza y dorados cabellos, y el huraño habitante de los yermos de Santiago, que se alimenta de algarrobas y miel silvestre, y el poético tucumano, que suspende su lecho a las ramas del limonero, y los pueblos que moran sobre las faldas andinas, y los que beben las azules aguas del Salado, y los tostados hijos del Bracho que cabalgaban sobre las alas veloces del avestruz, y el gaucho fronterizo, que arranca su elegante coturno al jarrete de los postres. – Que flaco está el rancho, sargento Contreras – exclamó un mulato salteño, dirigiéndose a cierto hombrón de rostro bronceado y ondulosa cabellera, mientras revolvía un churrasco en las brasas del hogar. – Nadie diría que hoy hemos matado tanto gallego de mochila repleta. – Y llevado un convoy de víveres frescos, que no había más que pedir. - ¡Al diablo el comandante Heredia y su fuego de flanco! Otra cosa habría sido si mandara cargar por retaguardia: ni un sarraceno pasara el Abra para ir a contar el cuento. ¡Que no  hubiese hecho cada uno como el capitán Teodoro: desobedecer y atacar! – ¡Pobre capitán Teodoro, tan valiente y tan buen mozo! – Hubiera yo seguido, si me encuentro cerca de él. – Yo me hallaba entonces a la otra banda del río, encaramado en la copa de una ceiba vaciando sobre aquellos diablos la carga de mi fusil, y vi al capitán arrojarse, espada en mano, al centro de la columna. ¡Caramba, hubo un fiero remolino, estocada por aquí, mandoble por allá…! Luego sonaron casi a un tiempo cuatro tiros y… todo se acabó…  Ya sólo vi un caballo que huía espantado río abajo. – Yo hacía fuego acurrucado en el hueco de un tronco y vi al pobre capitán caer atravesado de balas. Por más señas de una litera salió un grito que me partió el corazón. Fue una voz de mujer: de seguro era algo de él. – O de oficial godo que mató del primer hachazo. ¡Pulsos tenía el capitán Teodoro… y eso que no llegaba a los 20 años! -¡Teodoro! ¿Por qué no llevaba el apellido? - ¡Quién sabe! – Yo lo sé: porqué su padre era un gallego ricacho y testarudo, que le achacaba el delito de servir en nuestras filas y lo
Había desheredado hasta quitándole el nombre. – ¡No importa! Así Teodoro a secas, era un valiente soldado. ¡Mal haya mano que lo mató! No le pido más a Dios sino el consuelo de


ponerle a tiro de mi cuchillo. – ¿Dónde cayó el capitán? – En la angostura del río,  más allá
de los cinco alisos, al salir a la altura de los sauces. El mayor Peralta fue ya en busca de su cuerpo. - ¡Hum! ¡Quién sabe si podrá encontrarlo!
A esa hora el sol no se había puesto y una pandilla de cóndores revoloteaba en el aire. Esos diablos en un momento despabilaban el cadáver de un cristiano… - ¡Quién vive! – gritó a lo lejos la voz de un centinela. -¡La Patria! - ¿Qué gente? – Soldado.
Y un jinete, llevando en brazos un cadáver, entró en el recinto del campamento. – Por aquí, Peralta – gritó un hombre saliendo de la única tienda que había en el campamento. - ¿Logró usted encontrarlo? - Sí, comandante - respondió con voz sorda el otro -, ¡aquí está! El comandante recibió en sus brazos el cadáver y lo condujo a la tienda, donde lo acostaron sobre una capa de grana bordada en oro, despojo que al principio de la campaña había el comandante Heredia tomado al enemigo. – He ahí adonde conduce un aturdimiento imprudente – exclamó el jefe dando una mirada de dolor al rostro ensangrentado del muerto -. ¡Pobre Teodoro! Acometió una locura que ni aun sus veinte años podían excusar: ¡arrojo inútil y temerario que lo ha llevado a la muerte! ¡Se habría dicho que la buscaba! – Sí – respondió aquél que había traído el cadáver -, fue a su encuentro: pero así lo exigía el deber. No se compare usted con él, comandante. El alma de usted es reflexiva, fría y reside en la cabeza: la de él moraba en el corazón. - ¡Locos! – murmuraba Heredia, abandonando la tienda convertida en capilla ardiente -. ¡Locos! Traer a esta guerra sagrada el imprudente arrojo de un torneo es robar a la patria la flor de sus campeones. ¡Cuántos valientes más contaran nuestras filas con algunas calaveras menos! - ¡El cumplimiento de un deber!- repetía Peralta, solo ya con el cadáver de su amigo - . El cumplimiento de un deber: he ahí lo único que yo sé, noble amigo, del trágico desenlace de tu historia; pero tu fin ha sido grande y glorioso. ¡Duerme en paz!    
Y sentándose en una piedra ocultó el rostro entre las manos y se hundió en dolorosa meditación, en tanto que los rumores del campamento se extinguían, sucediéndose el canto del búho y el aullido de los chacales, que no lejos de allí destrozaban los sangrientos miembros de los muertos.º
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Juana M. Gorriti  por  Juana M. Gorriti

EXILIO: “Niña era todavía, cuando siguiendo a mi padre proscrito, vine con mi familia a Bolivia. Atravesada la frontera, la multitud expatriada se diseminó en el territorio vecino; y nosotros fuimos a detenernos en un pueblo de indios situado en una vertiente de los Andes. En aquella primera etapa sobre el suelo extranjero todo era duelo para los desterrados que, perdidos en un día patria, fortuna y hogar, encontraban cuanto veían en torno suyo, tétrico y sombrío. No así yo, para quién el hoy como el mañana siempre color de rosa. 

ESTOFADO ARIQUEÑO
Tomar un trozo grande de carne de vaca, una rabadilla de cordero, media gallina y un buen chorizo. Acomodarlos en la olla y agregar cabezas de cebolla partidas en dos, un ramito de perejil, garbanzos remojados, una buena porción de mantequilla, dos dientes de ajo, pimienta molida y entera, una onza de chocolate rallado, una botella de vino tinto abocado, media de agua, seis cucharadas de buen vinagre blanco y sal y una pizca de comino. Cocer a fuego lento durante cuatro horas en cacerola de hierro tapada. No revolver sino dejarlo quieto. “Cuando se destapa – dice doña Beatriz Llosa – “Exhala un perfume delicioso, que despierta el más muerto apetito.”




PALABRAS: “El 27 de marzo de 1865, dos días después de la fecha carta de Ud., Belzú, mi marido, el hombre que enlutó mi destino entero vencedor de un combate en el que el pueblo derrotó al ejercito, fue asesinado por el general que mandaba éste. Vinieron a decirme que Belzú había caído atravesadas las sienes de un balazo, y yo corrí en medio del combate; llegué hasta donde yacía el desventurado ya cadáver, lo levanté en mis brazos y en ellos lo
llevé a casa: a ese hogar que él había abandonado tanto tiempo hacía. Con mis manos lavé su ensangrentado cuerpo, y acostándolo en su lecho mortuorio, lo velé y no me aparté de él
hasta que lo coloqué en la tumba. La misión de la esposa parecía ya acabada; mas he aquí el pueblo que me rodea y me pide más: me pide que lo vengue. Sí: lo vengaré con una noble y bella venganza, haciendo triunfar la causa del pueblo que era la suya”.


CARTA A JOSÉ HERNÁNDEZ                                                    Abril de 1880
“Primo mío y querido amigo:
Por mi hijo Julio he sabido con pena que Vd. No recibió la carta en que le daba un millón de gracias y felicitaciones, anunciándole haber llegado a mis manos el precioso con que Vd. Me favoreció; la segunda parte de su bellísimo poema “Martín Fierro”.
En Lima ha tenido entusiasta acogida esta publicación, cuyas bellezas poéticas deleitan a los lectores de todas latitudes; pero solo a nosotros, hijos de ese país mágico del fantasista lenguaje, nos será dado gustar con su deliciosísimo sabor, el colorido local de esas gráficas imágenes que hacen de este libro una serie de cuadros plásticos de sorprendente verdad. – Estoy encantado con el “Martín Fierro” de Hernández - díjome uno de los primeros literatos de Lima. – Y sin embargo – respondí para ustedes; ese hermoso poema es Rosario en Berberie. – ¿Por qué?  - Porque la mitad de sus bellezas son para ustedes sánscrito: no las
comprenderán. –Pues yo las percibo muy bien. - ¡Error! O sino explíqueme Vd. esta:
Nos retiramos con Cruz / a la orilla de un pajal. / por no pasarlo tan mal / en el desierto infinito, / hicimos como un bendito / con dos cueros de bagual/.
- Pues claro: en lo bendito expresa la prontitud con que arreglaron las pieles de ese animal.  Cuando le hube explicado el problema de la frase picóse enormemente y no me ha perdonado aquella explicación.
- Espero que a estas horas, estará Vd. Escribiendo otro libro como este, que es una golosina: una vez gustado, se anhela otro semejante.
Saludamos a Vd. Julio y yo, y le estrechamos cordialmente la mano.
De Vd., prima y afectísima amiga.”                                           Juana M Gorriti


  *LO ÍNTIMO*

“Puedo hablar así sin que se me tache de alabanciosa según Ricardo Palmas, las viejas no somos mujeres.”

“Ahora sí, en verdad, comienzo a sentir llegar la muerte…, llega en tiempo en que la vida pesa como ropa mojada que es preciso cambiar.”

“Soy una presa del sepulcro por más que te de vueltas la vida.”
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ACTIVIDADES DE ESCRITORES DE ZONA NORTE  SADE

       RONDAS LITERARIAS                            Confitería  “NICANOR”
                             Arenales 1946 -  Martínez

Último sábado de cada mes 16,30hs.
Invitación para amantes de la literatura, escritores y oyentes.
Micrófono abierto                                                                        Entrada libre y gratuita


ATENCIÓN SOCIOS
Encuentro mensual en nuestra sede. El primer miércoles de cada mes a las 18hs. se realiza nuestra reunión social. Invitamos a todos los escritores a conocer nuestros proyectos, con el objetivo de crecer y compartir inquietudes.
Informa: Beatriz Goyechea


ACTIVIDADES:
   El sábado 25 de Septiembre se realizó la entrega de Premios del III Certamen Literario Internacional organizado por el CLUB DE LEONES DE MARTÍNEZ.
SADE estuvo presente oficiando la organización; nos representaron como jurado los escritores: Pedro Naimogín, Guillermo Gioino, Ángela Prado, Antonieta P. De Ferreira, Graciel A. Falcone, Estela Garrido, José A. Gonzáles, Abel Cammi.

   La BIBLIOTECA POPULAR JUAN MARTÍN DE PUEYRREDÓN DE SAN ISIDRO convocó a la SADE a oficiar como Jurado del Certamen Cuento, estarán a cargo las escritoras Martha Isabel Muñoz, Ángela Prado y Estela Garrido.

    El CENTRO CULTURAL DE TANGO ZONA NORTE, invitó a la SADE a evaluar las obras del certamen: “UN PIROPO GALANTE”.
  
   SADE ZONA NORTE viajó al III Encuentro Regional de Escritores Del Mercosur realizado en Gualeguaychú, Entre Ríos, los días 17, 18, y 19 de septiembre. Compartimos esta experiencia enriquecedora, que nos alienta a seguir bregando por la cultura con nuestros pares de Ecuador, Brasil y Uruguay.

   SADE prepara con gran ilusión el cierre de su ciclo del año 2010. Año de festejo, año en que cumplir una década significa seguir comprometiéndose con el trabajo ordenado, que dignifica el oficio del escritor, en la defensa de la palabra escrita, en un terreno de pasiones intensas donde todo vale mientras la literatura sea la consigna.




SOCIOS GALARDONADOS
Escritora: MARTHA ISABEL MUÑOZ
Concurso: Certamen Literario organizado por CLUB DE LEONES DE MARTÍNEZ
MENCIÓN DE HONOR
Categoría: POESÍA

  La editorial de LOS CUATRO VIENTOS seleccionó como finalistas para la antología “Poetas y Narradores Contemporáneos 2010” a los escritores: ÁNGELA PRADO, MARTHA MUÑOZ, GRACIELA FALCONE, CALOS BONAVITA.

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En su 3º ciclo consecutivo de “ARGENTINA LEE POESÍA” y con el objetivo de promover la lectura, sostener su hábito y fomentar el placer de la misma, el  pasado 8 de septiembre oficio el CLUB DE LEONES DE VILLA ADELINA el evento invitando a varias sedes culturales. Participaron: “NUNA TUNAY”, ballet folklórico coordinado por la Sra. Mirtha Gaitan, APOA, coordinado por la escritora Mary Acosta, SADE  ZONA NORTE ayudante en coordinación, la escritora Martha Muñoz.

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